Fuente: crónicaveracruz
Una pérdida eléctrica es la diferencia entre la cantidad total de energía generada y la cantidad total consumida por los usuarios finales. Existen dos tipos de pérdidas: las pérdidas técnicas y las pérdidas no técnicas.
Se trata de aquellas en donde la dispersión de la energía se da en los componentes eléctricos por:
Este tipo de pérdidas deben ser detectadas por la CFE con el fin de renovar los sistemas y dar mantenimiento a los equipos que lo requieran. En caso de que notes algún factor de este tipo, es importante que lo reportes este problema a la Comisión.
Son aquellas originadas por errores en la medición, facturación o por las llamadas “malas prácticas” de los consumidores. Éstas últimas serían las instalaciones no autorizadas mejor conocidas como “diablitos” y las alteraciones en los medidores de luz. El robo de electricidad puede ser castigada de distintas maneras y pueden llegar a ser sanciones millonarias:
A inicios de 2016, la CFE reportó que en tan sólo dos meses (enero-febrero) se reportaron 55 casos de robo de energía eléctrica en el país, esto sólo a través de los denominados diablitos. En paralelo la instancia informó que las sanciones por aplicar serían:
Cabe mencionar que el Código Penal Federal, en el artículo 368, de la fracción II, establece que cuando un usuario se apodera del “fluido eléctrico”, es decir, cuando no tiene un contrato de suministro, ni un medidor de luz puede recibir sanciones de:
Un caso muy sonado ocurrió en el municipio de Saltillo, donde la CFE multó a la entidad municipal con 13 millones de pesos por usar un “diablito” durante dos años, mismo que era usado para dar electricidad al parque Abraham Curbelo. Sin embargo, en caso de tratarse de usuarios, la CFE tomará acciones en el asunto, por lo que te recomendamos que evites este tipo de prácticas y evites sanciones innecesarias.