5 factores para calcular el retorno de inversión de tus paneles solares
El concepto de retorno de la inversión (ROI, por su nombre en inglés, Return On Investment) apunta a calcular qué tan fructífera es una inversión. Sirve para evaluar la efectividad de proyectos pasados, contrastando las ganancias con los costos, para tomar mejores decisiones a futuro.
A la hora de pensar en la instalar paneles solares, existen diversos aspectos que deben considerarse. Afortunadamente, existen diversas herramientas en línea que te ayudarán con las matemáticas al momento de calcular el ROI de tu instalación de paneles solares.
Pero más allá de las ecuaciones, es importante recordar que los paneles solares son una inversión a largo plazo y que sus ventajas implican diversos aspectos. Revisemos algunos de ellos:
1. El costo de la energía solar contra el de la compañía eléctrica
Mientras el costo de la electricidad tiende a aumentar con los años, el precio de los paneles solares tiende a bajar. Además, el sol es una fuente de energía renovable y que no es propiedad de nadie.
La energía eléctrica convencional se genera de diferentes formas y tiene costos variados según el país. En aquellos países donde su producción depende del petróleo, el precio puede aumentar o disminuir, como te platicamos en este artículo.
2. Participar en un proyecto cooperativo
En algunos casos, el costo de generación de energía es más alto en una instalación pequeña que en una de mayor tamaño. Para solucionar esto, existen muchas entidades que se encargan de financiar proyectos comunitarios, donde cada usuario aporta cierta cantidad y recibe su parte de la energía a un menor costo que si lo hiciese por su propia cuenta.
3. Rentabilidad mínima de la inversión
Si inviertes en energía fotovoltaica tendrás garantizada una rentabilidad mínima, ya que a largo plazo puedes vender los paneles. Esta rentabilidad dependerá de que hayas tenido éxito en la compra e instalación de tus equipos, adquiriendo la cantidad adecuada para tu inmueble y sin que hayan sufrido deterioros en el corto y largo plazo.
Una vez que hayas comprado el equipo producirás tu propia electricidad sin costes de funcionamiento y, si lo mantienes correctamente, podrás aprovechar este beneficio hasta por 40 años.
4. Seguridad de la inversión
Lo bueno de tener tu propio sistema de paneles solares es que obtienes un activo que custodias tú mismo, a diferencia de otras inversiones que deben ser manejadas por terceros, con el constante riesgo de una pérdida. Con los crecientes problemas que ocasiona el cambio climático, es de esperar que hayan cada vez más leyes que impulsen el uso de paneles solares, lo cual irá propiciando aumentos en su valor.
5. Valor agregado al inmueble
Este valor agregado dependerá de la ubicación de tu casa o negocio. Si el equipo está instalado en una zona donde no llega mucha luz solar, lo hace con poca intensidad o no es constante durante todo el año, puede que no afecte mucho al precio de venta del inmueble.
Sin embargo, si se encuentra en un lugar sin acceso a otros sistemas de energía, o los costes de la red pública de electricidad son muy altos, tener instalados paneles solares aumentará bastante el valor de la construcción.
Una cosa es cierta: si estás pensando hacer una inversión de esta magnitud, no puedes arriesgarte a enfrentar gastos mayores en el mediano plazo por culpa de productos o servicios de baja calidad. Recuerda que, tal como dice la expresión, lo barato sale caro. Analiza bien tus opciones con un asesor experto en la instalación de paneles solares en tu hogar.